Quiero compartir mis últimas pinturas, donde he imaginado distintas flores -evocadas desde mis recuerdos- y las he plasmado directo en el papel, sin un dibujo previo.
Después de muchos años pintando flores y plantas de manera muy minuciosa y detallada, es un bello ejercicio poder liberarme de la escuela naturalista y moverme hacia un espacio mucho más pictórico y libre. A veces da un poco de pudor porque el resultado queda mucho más al azar: el agua y los pigmentos hacen lo suyo, y hay que soltar el control. Para mí es un desafío y sinceramente, hace de la pintura una experiencia mucho más lúdica y relajada.
Para partir, mojo el área del papel donde voy a pintar con bastante agua, pero sin que se forme una piscina con volumen (o sea, una capa de agua abundante pero plana).
Luego, miro mi paleta y decido rápidamente cuál va a ser el color inicial. A veces parto desde la misma flor -pétalos-, y otras veces desde el tallo y hojas. Voy poniendo los colores uno junto al otro mientras el papel sigue húmedo, y dejo que las partículas de pigmentos fluyan en el agua. Una vez que todo se seca, decido si es necesario realzar algunos detalles.
La idea es dejar las flores lo más naturales posibles y no manosearlas demasiado para que no pierdan la espontaneidad.
Si al principio te cuesta liberarte del dibujo inicial, puedes trazar algunas líneas leves sobre el papel para guiar tus manchas. En este caso, hice una cuadrícula de 16 rectángulos como guía de la composición, lo que me ayudó a ordenarme. Para pintar, fui haciéndolo en los espacios al azar, porque no me gusta ser tan estricta cuando hago mis obras.
Mis colores favoritos son todos los minerales más pesados que tienen mucho grano y dejan una textura muy visible en el papel.
Pintar libremente es un regalo que nos podemos hacer, porque solemos tener la presión de cumplir con una expectativa auto impuesta que nos exige una perfección inalcanzable. Poder pintar sin presiones y simplemente dejando que un pequeño plan te guíe es excelente para estimular la creatividad y relajar las exigencias.
Espero que me cuentes de tus experimentos etiquetando a @piedrasy_agua en Instagram.
Cariños,
Geraldine.