En esta ocasión, Fran nos trae la familia de los colores Cadmio. Esta familia de fuego causó una revolución en la pintura. Vamos a ver por qué.

Los colores de cadmio, incluyendo el amarillo, naranja y rojo, presentan una vibrante gama de tonalidades saturadas que marcaron una revolución en la pintura del siglo XIX. La introducción de estos pigmentos, realizada por el químico alemán Friedrich Stromeyer, planteó nuevos desafíos y posibilidades en el arte pictórico. Impulsados por los avances científicos en óptica y luz, los pintores impresionistas se dedicaron a capturar la interacción de la luz visible con la superficie de los objetos. Sus elecciones cromáticas añadieron intensidad y presencia a sus creaciones, definiendo gran parte de la paleta utilizada por los artistas posteriores. Monet, Renoir, Cézanne, Degas y otros maestros integraron el amarillo, naranja y rojo de cadmio en sus paletas. 

El pigmento de cadmio, en sus variantes de amarillo, naranja y rojo, colores brillantes y con buena permanencia y fuerza de tinte, se convirtió en uno de los más familiares para los artistas. Hoy en día, los creadores siguen explorando la potencia cromática del cadmio, una herramienta que aporta una frescura y vibración características a obras que trascienden el lienzo y el papel.

 ¿Te gusta esta familia de colores? ¿Has pintado con ellos? Si quieres conocer más y probarlos, te dejamos los links de nuestros tres maravillosos colores cadmio.

Naranja de Cadmio - Rojo de Cadmio Claro - Rojo de Cadmio Magenta <3

Texto, fotos y video: Fran Araus.